Vamos a ir pensando en las próximas fiestas, este año
más hogareñas que nunca
y os traigo este plato
que mi madre preparaba
de antemano para estar más tranquila a la hora de servir
el almuerzo o la cena.
Ahora lo preparamos nosotros, ella lo disfruta y nos suele dar el visto bueno.
Está bueníííísimo. ¿Qué queréis que os diga?...es el sabor de toda la vida,
el sabor de nuestra casa.
- 1 solomillo
- 2 huevos cocidos
- Lonchas de jamón serrano, mejor ibérico
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Ciruelas pasas
- Orejones de albaricoque
- 1 cebolla fresca troceada
- 1 zanahoria troceada
- 1 vaso de vino blanco rebajado con un poco de agua.
- 2 ajos
- Perejil picado
- Sal y pimienta
- Almendras tostadas
Preparación
- Acondiciona el solomillo cortándolo en forma de libro y de nuevo se lamina por los laterales. Aplástalo con un mazo.
- Maja los ajos, el perejil, la sal y la pimienta. Extiende esta mezcla sobre el solomillo. Después coloca el jamón, las ciruelas y los orejones en trozos, los huevos en láminas a lo largo.
- Enrolla y ata el solomillo relleno con un hilo de cocina a lo largo y a lo ancho, para que mantenga su forma. En una fuente para horno coloca una cama de cebolla y zanahoria, pon encima la carne. Esparce sal, pimienta, el aceite y el vino.
- Introduce en el horno a 200º durante 20 minutos por cada lado o hasta que la carne esté tierna y dorada. Pincha para comprobar si está hecha. Si queda seca se le puede añadir un poco de agua.
- Para la salsa, pasa la cebolla, la zanahoria, las almendras tostadas por la batidora, con los jugos que ha dejado la carne. Espera a que enfríe el solomillo para cortar en rodajas. Sirve con la salsera al lado.
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